Que te den en griego se dice OXI. Naranjas. O Nein en alemán. Nanain en definitiva. Política emocionante. Tal es el oxímoron que nos llega de tierras helenas donde la Troika ha comprendido por fin el verdadero significado de un griego, que quedará en los anales de la historia. Más allá de su dimisión de hoy al estilo Roser en Popstar, a la UE le han hecho un Varufucker. Pensaron que lo de Tsipras fue pura Tsiripas y como aquel cerdo negro, gordo, insaciable llamado Napoléon de la Rebelión en la Granja de George Orwell siempre creyeron tener el corralito controlado. Hasta que les estalló el pollo, claro. Y lo hizo en forma de referéndum. Que vote el populacho. Qué horror. Populistas, terroristas.  ¿Qué será lo siguiente? ¿Una mujer en la Casa Blanca que diría Torrente ante la tumba de El Fary? Pedirle cuentas democráticas a Grecia que inventó la civilización occidental es como pedirle el carné de Jedi al maestro Yoda por saltarse un ceda en Tatooine. La Fuerza es poderosa en Grecia. Y el caso es que al final en las urnas se ha oído aquello de Espartanos, ¿hacemos un simpa? Ahu, ahu, ahu. Y la Unión Europea, como a Jerjes en las Termópilas, se le amontona el fiambre persa en el desfiladero.  A los exquisitos gentlemen de Club del  Euro nunca les gustaron los griegos de pelo en pecho cual sobaco de churrero. Fiesta y siesta ¿Les suena? Ahora volverán el Grexit y la amenaza de Apocalipsis. Pero si Europa camina hacia el abismo, si la Eurozona está en alerta roja ¿Por qué el Consejo Europeo espera a reunirse el martes? Es que hoy la Merkel tenía planes. 

FUENTE: Libertad Digital