Rajoy anda de mala gaita. Por aquello de que es galego y algo más. Lejos ha quedado la niña de Rajoy. Lejos han quedado los chuches. Anda más crecido que el Ebro. Tanto, que llama patético a Ken Sánchez e incluso recuerda a Tsipras que los suyo es pura Tsiripas. A este lado de las Termópilas, Mariano desenfunda más rápido. En ocasiones veo coletas. El caso es que Tsipras anduvo racaneando dracmas por el Eurogrupo, que son más chulos que Los Vengadores, prensando en aquello de está to pagao gallu. Nada más lejos de la realidad. Y aunque se llevo a Varufucker lo cierto es que de allí salieron bastante jodíos. Pero por una vez no fue La Merkel. Ni Jeroen Dijsselbloem, El Innombrable. Ni el finlandés de turno. Tsipras denunció un eje del mal…. Ibérico. Dice que en Portugal han querido echarle la mano al Passos Coelho y que en España quieren cortarle la coleta. Algo así como darle la patada a Pablemos en el culo de Alexis. Quieren derribarnos dijo Tsipras. Y la verdad no sé qué esperaba. En Bruselas no se fía. La única diferencia es que en lugar de un sicario te mandan a Wolfgang Schauble. Dice Mariano que no se puede ir por ahí haciendo promesas que no se pueden cumplir. Le dijo la sarten al cazo. Joroña que joroña.
FUENTE: El Mundo
Nosotros sí que estamos frustrados y jodidos,ya queda menos en el tiempo, de las 16 promesas incumplidas y 64 recortes sociales del PP con su mangurrino a la cabeza.
No es de extrañar que,este señor punto suspensivo, sea más propenso a pensar que “el amigo de mi enemigo es mi enemigo” y leña al mono que sale de balde...