Susanita tenía un marrón y se ha hecho la de Pilatos. En el PSOE hay tanto Herodes como Saturnos zampándose a sus hijos. Vamos que lo de Susanita iba a ser todo un parto. De risa. Además lo de competir no es lo suyo. Susanita la de la canción tenía un ratón y Susanita la de la Andasulía Ariquitaun de los ERE tenía un Griñán, roedor cuyo hábitat natural es la Junta. Su clima el del Clan de la tortilla con Manolo Chaves robando quesos. Quería alfombra roja como Lady GaGa y al final ha acabado con Poker Face. Y eso que ha habido tanto barón postulado a su favor que sólo han faltado los Thyssen para apuntarse al susanismo de moda en el aparato de Ferraz. Pensó que derrotar al PP en Al Andalus era algo épico y lo mismo da que el PSOE y los Cañameros presenten allí de candidato a unas papas con choco. La cosa es que Madina sigue esquivando cimitarras en la Medina socialista donde todos quieren ser califas en lugar del califa y Susanita no está en El Príncipe para seducir moreys. Con permiso de Valenciano, Carme y otras musas, sin Susanita nos quedamos sin pretty woman socialista. Sí, por el contrario, con Richard Gere sociata, que no es otro que Pedro Sánchez. Aunque parezca mentira el mancebo comparte especie con los humanoides Zapatero y Rubalcaba. Y entre la bruma de esta Transilvania de puños, rosas y espinas, la figura de Maléfica Chacón en la sombra. La que parte el bacalao. Algunos no se enteran. Siguen sordos como Pérez Tapias. 
 

FUENTE: El Mundo