Que la banca siempre gana, y no sólo al Monopoly, se puede comprobar muy fácilmente. Sólo hay que contar cuántos banqueros han saltado por la ventana desde que estalló la crisis. Ciudadanos, unos cuantos. Los banqueros prefieren que los rescaten pero con mi pasta, con tu pasta. Con mucha pasta. Tanta pasta que parecemos Giovanni Ranna. Y ellos, de desahucio en desahucio y te tiran porque les toca. Nosotros, de puente en puente y me tiro porque me lleva la preferente. Tal es el desmadre que los jueces ya se mojan. En lo que dura esta tira, 2,88 de nuestros paisanos se han visto realojados en la suite del Hotel Puta Calle. Aunque 500 familias se ven cada día en la calle por una norma de 1909, el Gobierno se hace el moderno con su Código de Buenas Prácticas para la banca. Algo así como regalarle una rosa a un orco. Los partidos al final pasan el Rato repartiéndose el Botín viendo la Liga BBVA.
 

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