De Argentina se ha vuelto caliente el séquito de Madrid 2020. Malos aíres, querido. El COI pasa de Madrid olímpicamente. No hay dos sin tres –ni cuatro- ni a la tercera fue la vencida. Así funciona la gerontocracia pleistocena del COI, donde su presidente, Jaques Rogue, ejerce de chavalillo de la pandilla con sus tiernos 71 años. No pasamos por el aro ni con carpas in situ, repletas de voluntarios cortando jamón pata negra para los abueletes olímpicos. La próxima vez allá por el año 3050 -no lo duden, en el COI seguirán los mismos- deberíamos probar con chorizo de Salamanca. A Salamanca, Amaia no sabemos si la llevamos a lucir palmito o a doblar a Doña Letizia en las escenas de acción. En todo caso, se ve que el anuncio de Tampax no es suficientemente olímpico. Tampoco podemos olvidar al ínclito Alberto de Mónaco que entre que sale o no del armario se dedica a las preguntas con mala baba. En Singapur 2005, por el … te la hinco, el monaco de Alberto, preguntó por ataques terroristas. En Buenos Aíres, cual guiñol de Canal Plus Francia, preguntó por el dopaje y llevó la operación a mal Puerto. A mí me da Grimaldi como se abona el terreno a París 2024. A todo esto, mientras las momias votaban, el Faraón Gallardón se removía en su sarcófago, Erdogan gaseaba manifestantes estambulinos y Fukushima se preparaba para mutar en alegría. Así que relaxing cup of café con leche y a otra cosa. Nos hemos quedado sin Madrid 2020, sin Madrid 2016, sin Madrid 2014 y sin Madrid 1972. Pero siempre nos quedará el Madrid Arena.
FUENTE: Libertad Digital
A mi lo que me parece increible es que se diera casi por hecho, así que la decepción ha sido brutal. Muy tipico del carácter español hacerse castillitos en el aire. Por otro lado, me parece un poco de desprecio hacia España, yo no me volvería a presentar.