No soy Madonna. Pero canto Hollyday. Ha llegado el momento de sofocar los calores vietnamitas que convierten a los ciudadanos de Madrid en malditos charlies que degustan el olor a napalm por la mañana. El mismo aroma que respira el presidente del Gobierno con cada desayuno en Moncloa. Sin Miedo a Soñar. Es decir SMS. Mi tesssssorero canta la Traviatta y cual Asuranceturix, el bardo, sus estridencias dejan sordo al pepero y retumban en Génova como psicofonías, tal y como Raimunda se paseaba por el Palacio de Linares. Hemos pasado de fantasmones a fantasmas, así que lo mejor es que llegue el veranito y la marea playera de tupperwares en la arena y tufarros multinacionales tostados cual gambas acabe por sofocar la escandalera del tesorero que sabía demasiado. Así que la tira, que promete grandes y jugosas novedades para el próximo curso, tampoco se olvidará la toalla cuando se vaya a la playa. Lo dicho, volveremos cual Ave Fénix, resurgiendo de nuestras cenizas cual colilla pocha en cenicero, para un regreso en septiembre con mucha tela que cortar y con más de un bombazo que hará las delicias de vosotros, mis queridos fans, a los que últimamente, por razones de fuerza mayor, que ya descubriréis, he tenido un poquito abandonado. La Tira se estira y nunca se retira. Feliz Verano. Coming soon. Próximamente. Septiembre promete. Hacedme caso.